Planear tu retiro en México puede parecer un laberinto, pero estoy aquí para aclararte el panorama. Esta guía es el mapa que necesitas para entender tu pensión del IMSS, enfocándonos en el pilar más importante: las semanas cotizadas. Te llevaré de la mano a través de las dos realidades del sistema, la Ley de 1973 y la de 1997, para que sepas exactamente a cuál perteneces y qué significa para ti. Descubrirás cuántas semanas necesitas para pensionarte en 2025 (pista: son 850 para la Ley 97) y cómo se compara con las 500 de la Ley 73. Pero no nos quedaremos ahí; te compartiré estrategias probadas como la Modalidad 40 y las aportaciones voluntarias, que he visto transformar pensiones modestas en retiros verdaderamente dignos. Si te preguntas cómo asegurar tu futuro, la respuesta empieza aquí.

Tabla de Contenido
- El Gran Dilema: ¿Cuándo y Cómo me Pensiono?
- Régimen del 73: Las Claves del Sistema Anterior
- Régimen del 97: La Nueva Era de las Afores
El Gran Dilema: ¿Cuándo se Pensiona un Trabajador en México?
He pasado años asesorando a personas como tú, y si hay algo que he aprendido, es que la jubilación genera tanto anhelo como ansiedad. Es ese momento con el que soñamos, el de recoger los frutos de toda una vida de trabajo. Sin embargo, el camino para llegar ahí a menudo se siente como un laberinto de reglas y números. La pregunta que escucho una y otra vez es: 'Ricardo, ¿cómo y cuándo voy a poder pensionarme?'. La buena noticia es que, aunque el sistema del IMSS parece complejo, entenderlo es el primer paso para tomar control de tu futuro.
Lo primero es lo primero: en México, tu camino a la pensión depende de una fecha clave: el 1 de julio de 1997. Si comenzaste a cotizar en el IMSS antes de esa fecha, perteneces al Régimen de la Ley del 73. Si empezaste en o después de ese día, estás en el Régimen de la Ley del 97. Saber esto es fundamental, porque define todas las reglas del juego para ti, desde las semanas que necesitas hasta cómo se calculará el dinero que recibirás cada mes.
La Pregunta del Millón: ¿Cuántas Semanas Necesito para Pensionarme?
Aquí está el corazón del asunto, la métrica que todos deben tener en mente: las semanas cotizadas. Son la prueba de tu constancia laboral y la llave que abre la puerta de tu retiro.
Para quienes están bajo la Ley del 73, la meta inicial es más accesible: necesitas un mínimo de 500 semanas de cotización, lo que equivale a unos 10 años de trabajo. Ojo, este es solo el requisito para tener el derecho, no garantiza una pensión alta. Más adelante te contaré cómo mejorarla.
Para los que pertenecen a la Ley del 97, la historia ha cambiado para bien. Originalmente se pedían 1,250 semanas, pero gracias a una reforma, el requisito se hizo más alcanzable. Para el año 2025, necesitarás tener acumuladas 850 semanas cotizadas. Este número sube 25 semanas cada año hasta llegar a 1,000 en 2031. Esta reforma fue un respiro para millones de personas que veían muy lejana la posibilidad de pensionarse.
¿Qué Significa Pensionarse por Semanas Cotizadas?
Cuando decimos que 'te puedes pensionar por semanas cotizadas', nos referimos a que tu pensión es un derecho que construyes tú mismo. No es un regalo, es el resultado de cada semana que tú y tu patrón aportaron al IMSS. Cada semana cuenta y suma a tu historial. Por eso es vital que te conviertas en el guardián de tus propias semanas. Te recomiendo revisar tu 'Constancia de Semanas Cotizadas' en el portal del IMSS al menos una vez al año. Créeme, he visto casos de gente que llega a los 60 años y descubre que le faltan semanas por un error administrativo de un viejo trabajo. ¡Que no te pase a ti! Asegurarte de que tu conteo es correcto es tan importante como acumular las semanas mismas.

Secretos y Estrategias del Régimen 73: ¡El Camino Dorado a la Pensión!
Si te tocó el Régimen de la Ley del 73, déjame decirte que tienes en tus manos una oportunidad de oro para asegurar un excelente retiro. Pero para aprovecharla, no basta con saber el número de semanas; hay que conocer las estrategias que marcan la diferencia. En mi experiencia, quienes logran las mejores pensiones son quienes planifican sus últimos años de vida laboral con inteligencia.
Ya establecimos que necesitas un mínimo de 500 semanas, pero el error más común que veo es pensar que con eso es suficiente. Las 500 semanas son solo tu boleto de entrada. El verdadero cálculo de tu pensión se basa en dos factores clave: el número total de semanas que acumulaste y, muy importante, el salario promedio de tus últimas 250 semanas cotizadas (los últimos 5 años). Aquí es donde una buena estrategia puede cambiar tu vida.
Más Allá de las Semanas: Edad y la Vital Conservación de Derechos
Además de las semanas, necesitas cumplir con la edad. Puedes tramitar tu pensión por Cesantía en Edad Avanzada a partir de los 60 años, o por Vejez a los 65. La diferencia es grande: a los 60 recibes el 75% de lo que te tocaría, y ese porcentaje sube 5% cada año hasta llegar al 100% a los 65. Es una decisión personal entre retirarte antes con un poco menos o esperar para recibir el monto completo.
Ahora, hablemos de un concepto crucial que muchos olvidan: la conservación de derechos. Imagina que dejas de trabajar y de cotizar. El IMSS te da un 'periodo de gracia', que es la cuarta parte del tiempo total que cotizaste. Si trabajaste 20 años (1040 semanas), conservas tus derechos por 5 años (260 semanas). Si dejas pasar ese tiempo sin volver a cotizar, pierdes tu derecho a pensión, aunque tengas la edad y las semanas. Es una trampa en la que es fácil caer si no estás informado.
La Estrategia Maestra: La Famosa Modalidad 40
Este es el secreto mejor guardado para quienes buscan una pensión excepcional bajo la Ley 73: la Modalidad 40 o 'Continuación Voluntaria'. Esta maravilla te permite, si fuiste dado de baja por un patrón, seguir pagando tus aportaciones por tu cuenta. ¿El objetivo? Mejorar los dos pilares de tu pensión: sumar más semanas y, sobre todo, elevar tu promedio salarial de los últimos cinco años.
Te pongo un ejemplo real que vi hace poco: un señor con más de 1,500 semanas, pero con salarios bajos en sus últimos empleos. Su pensión iba a ser muy modesta. Invirtió durante tres años en la Modalidad 40, registrándose con un salario cercano al tope. El resultado fue una pensión casi cuatro veces mayor de la que hubiera tenido. Es una inversión, sí, pagas una cuota mensual, pero el retorno en forma de una pensión vitalicia y heredable es, en muchos casos, la mejor decisión financiera de tu vida. Esta estrategia es la respuesta definitiva a cómo puedes no solo pensionarte, sino asegurarte un futuro próspero.
Navegando el Régimen 97: La Era de la Cuenta Individual y tu Afore
Si tu vida laboral comenzó después del 1 de julio de 1997, bienvenido a la era de las Afores. Aquí las reglas son distintas. Tu pensión ya no sale de un fondo común, sino que dependerá directamente de lo que logres ahorrar en tu cuenta individual de Afore. Esto te da un poder que las generaciones anteriores no tenían: el control está en tus manos.
La pregunta sobre cuántas semanas se necesitan para pensionarse bajo esta ley tiene una respuesta clara para el futuro cercano: para 2025, el requisito es de 850 semanas cotizadas. Este número seguirá subiendo gradualmente hasta llegar a 1,000 en 2031. Una vez que cumples con las semanas y la edad (60 años o más), llega el momento de decidir cómo quieres recibir tu dinero.
Tus Opciones para Recibir la Pensión en la Ley 97
A diferencia de la Ley 73, aquí tienes opciones, y la que elijas dependerá de cuánto dinero acumulaste en tu Afore:
- Renta Vitalicia: Le entregas tus ahorros a una aseguradora y ella te paga una pensión mensual de por vida. Es la opción más segura si buscas la tranquilidad de un ingreso fijo que no se acabará.
- Retiro Programado: Tu Afore te va pagando mensualmente con cargo a tu propio saldo. La cantidad se recalcula cada año. Es más flexible, pero existe el riesgo de que tus fondos se terminen si vives más de lo previsto.
- Pensión Mínima Garantizada: Esta es la red de seguridad del sistema. Si cumples con la edad y las semanas, pero tu ahorro no es suficiente para las opciones anteriores, el gobierno te asegura una pensión básica de por vida, equivalente a un salario mínimo. Es la prueba de que, si fuiste constante, tienes un apoyo garantizado.
Estrategias para Engordar tu Pensión en el Régimen 97
Saber que te puedes pensionar con un mínimo de semanas es solo el comienzo. La verdadera meta es hacer crecer el saldo de tu Afore lo más posible. Aquí te doy mis dos consejos de oro:
- Aportaciones Voluntarias: Esta es tu arma secreta. Cada peso extra que deposites en tu Afore, por pequeño que sea, se pone a trabajar y a generar rendimientos. Gracias al poder del interés compuesto, esas pequeñas aportaciones se pueden convertir en una suma enorme a lo largo de los años.
- Elige la Afore Correcta: ¡No todas son iguales! Un error muy común es no poner atención a qué Afore maneja tu dinero. Revisa las comisiones que cobran, pero sobre todo, los rendimientos que te dan. Una diferencia de un punto porcentual en el rendimiento puede significar cientos de miles de pesos más o menos en tu pensión final. Compara y, si es necesario, cámbiate a la que te dé más a ganar.
El sistema evoluciona, por lo que te recomiendo siempre tener a la mano la página oficial de la CONSAR (Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro). Es una fuente confiable de información y herramientas. La gran lección de la Ley 97 es que tu futuro está en tus manos. La pregunta clave ya no es solo con cuántas semanas te pensionas, sino ¿qué estás haciendo hoy para construir la pensión que quieres mañana?