El Tablero Político hacia 2027: Las Estrategias de Larreta y Schiaretti en un Año Clave

He visto muchos ciclos electorales en Argentina, pero el de 2025 tiene un sabor especial. Aunque en los papeles son elecciones legislativas, en la práctica son el primer gran test para la carrera presidencial de 2027. Dos figuras que conocen bien el juego del poder, Horacio Rodríguez Larreta y Juan Schiaretti, ya están moviendo sus piezas con una estrategia clara. Este artículo analiza a fondo cómo cada uno, desde su rincón, busca construir una alternativa al gobierno actual y al kirchnerismo. Créanme, lo que veremos en las urnas en 2025 no es solo quién gana una banca en el Congreso, sino quién llega con más fuerza a la verdadera batalla por la Casa Rosada.

Imagen del Congreso de la Nación Argentina, epicentro de las batallas políticas de cara a las elecciones 2025, con los candidatos presidenciales en el horizonte.

Prólogo 2025: La Carrera Presidencial que ya Empezó

El año 2025 nos encuentra, una vez más, en medio de una singular ebullición política. Si bien el calendario marca elecciones legislativas, en los pasillos del poder y en las mesas de café, la conversación apunta más lejos, hacia 2027. Llevo décadas analizando la política argentina y puedo asegurarles que estas elecciones de medio término son mucho más que una simple renovación de bancas; son el verdadero campo de pruebas donde se miden fuerzas, se testean liderazgos y, sobre todo, se pavimenta el camino para los futuros aspirantes presidenciales. Es, en esencia, la primera gran encuesta nacional de cara a la próxima elección presidencial.

La suspensión de las PASO este año cambió por completo las reglas de juego. Las negociaciones se volvieron más crudas y directas, forzando a los líderes a mostrar sus cartas antes de tiempo. En este escenario, dos figuras con proyectos bien definidos emergen con estrategias distintas pero con un objetivo en común: la presidencia. Hablo de Horacio Rodríguez Larreta y Juan Schiaretti. Ambos representan corrientes moderadas que buscan capitalizar el descontento con la polarización, un espacio que en Argentina siempre parece vacante.

El plan de Larreta es fascinante desde el punto de vista estratégico. Tras su derrota en las primarias de 2023, el exjefe de Gobierno porteño no se retiró, sino que comenzó un metódico proceso de reinvención. Su postulación con un partido propio es una jugada audaz. No busca solo un cargo, sino reconstruir su base de poder, demostrar que su capital político sigue intacto y sentar las bases para su proyecto presidencial. Su campaña se centra en lo que mejor sabe hacer: la gestión y la experiencia, buscando diferenciarse del gobierno y del ala más dura de su antiguo espacio.

Por otro lado, la figura de Juan Schiaretti cobra cada vez más fuerza. El exgobernador de Córdoba, después de una elección presidencial muy digna en 2023, se consolidó como el referente del peronismo no kirchnerista. Su proyecto es paciente y federal. Aunque decidió no ser candidato en 2025, su rol es el de armador nacional. Su meta es clara: fortalecer su partido, 'Hacemos', en todo el país, tejer alianzas con otros gobernadores y posicionarse como la voz del interior productivo. Cada candidato que responda a su espacio será una pieza clave en su tablero con miras a 2027.

La gran pregunta que nos dejan estas legislativas es cómo se reconfigurará el poder. ¿Cuánto espacio real existe para una tercera vía, ese anhelado centro político que tanto Larreta como Schiaretti aspiran a representar? La respuesta la tendremos en octubre, pero la construcción de sus proyectos es un trabajo de orfebrería que ya está en marcha y que definirá la Argentina de los próximos años.

Retrato de Horacio Rodríguez Larreta, analizando su estrategia larreta 2025 y su camino para convertirse en larreta presidente 2025.

Larreta: El Desafío de la Reinvención y un Nuevo Centro Político

El camino de Horacio Rodríguez Larreta es la crónica de una reinvención anunciada. Después del duro golpe en las primarias de 2023, muchos lo dieron por acabado. Sin embargo, quienes lo conocemos de cerca sabemos de su resiliencia y su capacidad de trabajo casi obsesiva, pulida durante sus años en la gestión porteña. Su proyecto actual es mucho más que una candidatura; es la fundación de una nueva plataforma política. Es su manera de decirle al círculo rojo: 'sigo aquí y puedo construir desde cero'. Su apuesta en la Ciudad de Buenos Aires es el primer paso táctico de una estrategia a largo plazo que tiene un solo nombre: la presidencia en 2027.

Su plan se apoya en pilares muy claros. El primero, y su mayor fortaleza, es la reivindicación de la gestión. En un país acostumbrado a las promesas rotas, Larreta vende resultados concretos, orden y planificación. Su segundo pilar es la diferenciación. Ha marcado una distancia calculada tanto del gobierno de Javier Milei como de la interna del PRO. Esta jugada le permite construir un perfil propio para atraer a ese electorado de centro que hoy no se siente representado por los extremos. El resultado que obtuvo en las legislativas porteñas es visto por su equipo no como algo menor, sino como un 'piso de votos propios', el cimiento sobre el cual edificar su regreso a la escena nacional.

El tercer pilar, y el más complejo, es la construcción de alianzas. Larreta sabe que en la política argentina nadie llega solo. Su mirada está puesta en formar un nuevo frente de centro, amplio y plural. Y es aquí donde la figura de Juan Schiaretti se vuelve clave. Aunque hoy parecen competir, en política las rivalidades no son eternas. En privado, muchos dirigentes de ambos espacios sueñan con una gran alianza que una al 'larretismo' con el peronismo federal de Schiaretti. Sería un movimiento capaz de romper la polarización.

Por supuesto, los desafíos son enormes. Primero, debe demostrar que su proyecto no es solo para los porteños y que tiene anclaje real en el resto del país. Segundo, en un escenario político tan fragmentado, construir una mayoría es una tarea titánica. Y, finalmente, debe lograr algo que le costó en el pasado: conectar emocionalmente con la gente. Su nueva estrategia de comunicación, por momentos más directa, parece apuntar a corregir esa debilidad. La carrera ya empezó, y cada paso que dé en 2025 definirá si su reinvención lo lleva, finalmente, a la Casa Rosada.

El exgobernador Juan Schiaretti en un acto político, impulsando su proyecto schiaretti presidente 2025 enfocado en el federalismo.

Schiaretti: La Apuesta por un Federalismo como Tercera Vía

En la otra esquina del centro político, se planta con solidez Juan Schiaretti, el experimentado exgobernador de Córdoba que representa la esperanza de una 'tercera vía' con tonada federal. Su proyecto presidencial es el fruto de décadas de construcción política desde el interior, un armado que busca ser una alternativa real al centralismo de Buenos Aires y a la grieta ideológica. A diferencia de otros políticos que buscan el titular del día, Schiaretti juega al ajedrez. Su estrategia es la de un constructor paciente, que prefiere los acuerdos sólidos al ruido mediático. Su decisión de no ser candidato en 2025 lo confirma: su rol es el de estratega, el de tejer la red que sostendrá el espacio.

La columna vertebral de su plan es consolidar 'Hacemos por Nuestro País' como una fuerza con presencia en todo el territorio. El objetivo es claro: demostrar que el 'modelo cordobés' es exportable. Este modelo, que en mis charlas con empresarios y políticos del interior siempre surge como ejemplo, se basa en algo que suena simple pero es complejo de lograr: equilibrio fiscal, fuerte inversión en obras y una alianza público-privada que fomente la producción. Schiaretti le habla directamente al corazón productivo del país, a los que piden reglas claras y un Estado que acompañe en lugar de asfixiar.

La construcción de alianzas es, al igual que para Larreta, un capítulo clave. Schiaretti busca ser el punto de encuentro del peronismo republicano, pero su visión es más amplia. El diálogo constante con gobernadores de otras fuerzas políticas busca crear un 'eje federal' con peso propio. Y en ese armado, la posibilidad de una futura confluencia con el espacio de Larreta es un tema recurrente. Un frente que una al centro-derecha de gestión de Larreta con el peronismo productivo de Schiaretti tiene el potencial de redefinir el mapa político argentino.

Sin embargo, el camino no es sencillo. El principal desafío para Schiaretti es volverse una figura nacional, especialmente en el decisivo conurbano bonaerense. Su perfil de 'gringo' cordobés, aunque sólido, necesita trascender fronteras. Además, debe competir por el voto peronista sin quedar pegado al kirchnerismo y, a la vez, diferenciarse del gobierno actual. Es un equilibrio difícil. El resultado de las legislativas será el termómetro que mida si su proyecto tiene la fuerza necesaria para convertirse en una opción real de poder. Para quienes deseen seguir el pulso diario de la política, medios como Clarín ofrecen una cobertura constante de estos movimientos.